sábado, 23 de agosto de 2014

Héctor Labonia-Miramar, Provincia de Buenos Aires, Argentina/Agosto de 2014

MENTES ENFERMAS


No son días
de pétalos de rosas,
ni de mariposas
merodeando flores,
y de amaneceres diarios
y venturosos de soles,
con tardes apacibles
y que al llegar la noche,
la luna sea un queso blanco.
No, no son días de esos…
La gente en el planeta
clama  y protesta indignada,
por hombres mejores
que gobiernen el Mundo.
Que no haya guerras,
con matanzas incruentas
en las que se pierden hijos,
quedando sólo ancianos
llorando a sus niños.
Desterrar la corrupción,
estructurada y mafiosa,
que sin trabajo nos deja.
Y el desaliento acaece…
enturbiando el aire,
y los sueños más lindos,
se pierden, en grandes bolsillos
de “poderosos” avaros,
que roban dinero e ilusiones,
de pueblos enteros,
que luchan por subsistir
en medio de tanta puja.
Son hijos nacidos de madres,
que habitan idéntico suelo,
respiran el mismo oxígeno,
mueren como cualquiera…
Pero el afán de riquezas
enseñorea sus mentes enfermas,
dejando despojos por doquier,
y hasta tierra arrasada
en la que nada crece,
con tal de explotarla en su beneficio.
Los pueblos indignados,
claman y claman… a oídos sordos !

2 comentarios:

Laura Beatriz Chiesa dijo...

Héctor: la historia nos habla, desde siempre, de las mismas cosas. Cambian los procederes, los momentos, pero el hombre sigue siendo eso. HOMBRE. Mi abrazo,

Héctor dijo...

si,lo sé, el hombre progresa tecnológicamente, pero sigue teniendo los instintos básicos, milenarios y genéticos de la especie a la cual pertenecemos(eso somos una especie más)- esta siempre comenzando nuevamente-