viernes, 25 de julio de 2014

Graciela Celiz-Argentina-Literarte soporte papel/Julio de 2014

NORMA FORMARIANO
Título: Adán y Eva
Técnica: óleo a pincel
Medida: 80 x 100



UN  VIAJE  DE  IDA  Y  VUELTA

Transcurrió mucho tiempo de aquél viaje de ida y vuelta que marcó el destino de Laura.
Con tristeza se despidió de sus seres queridos, pero con mucha ilusión viajó con sus hijos a Estados Unidos. Allí la estaría esperando Marcos, su gran amor. Eso le daba la fuerza necesaria para comenzar una nueva vida, lejos de su tierra querida.
Cuando llegaron al aeropuerto de Nueva York, los esperaba un hombre extraño, diciendo que los trasladaría a Long Island  porque Marcos estaba muy afiebrado.
Laura sorprendida, sin tener alternativa, aceptó. Cuando de repente observa que desde la terraza del aeropuerto, se acerca Marcos. Vestía campera de cuero negro, abundante cabello oscuro y una mirada extraña, casi misteriosa. Saludó a los niños, sus hijos y a Laura,  fríamente. Sin dar explicación alguna, ingresó al auto, tomó el volante, y se dirigió a su departamento. Continuaba raro, distante, frío.  Algo estaba pasando pensó Laura, sin imaginar que su estadía allí, tan lejos de su país, duraría tan solo quince días.
Ella  esperaba un encuentro muy emotivo.  Marcos había viajado en busca de nuevos horizontes para el bienestar de su familia, queriendo reunirse con ellos, en cuanto fuera posible.  Esa hermosa mañana de un sol  otoñal,  Laura  comenzaba a sentirse cada vez más incómoda por la extraña actitud  de Marcos. Se dejaba llevar por el colorido paisaje de las pintorescas casas y jardines, el cielo azul, el matiz de las hojas de los árboles  y la alegría  que sentía, por haber logrado al fin, reunirse con su marido. Llegó la noche, Laura se puso su bonito ajuar, el mismo que vistió su noche de bodas. Intentó ser cariñosa, pero Marcos no reparó detalle alguno. Sin dejar de mirar el techo, callado, con los ojos irritados, como queriendo contener el llanto, le confesó que había otro amor. Laura quedó perpleja, sin entender lo que sucedía, intentó ser comprensiva, fue inútil.
Al día siguiente, Marcos fue a trabajar. Laura y los niños fueron de compras al Shopping. Al salir ve que un auto, a gran velocidad avanza hacia ella, como si la quisiera matar. Se corrió a tiempo y el auto desapareció. Asustada queriendo calmar sus nervios,  decidió ir a un hermoso parque cerca de allí. Los niños jugaban y reían, mientras ella contemplaba la belleza de los árboles que le permitían respirar aire fresco. Las aves revoloteaban en el lago,  como si quisieran dar un espectáculo ante los tristes ojos de Laura. Regresaron a la casa. Marcos continuaba igual. Los voy a llevar a dar un paseo, les dijo. Fueron a Manhatan (otra decepción). Cierren la ventanilla dijo, cuando  se detuvieron en el semáforo. Es muy peligroso aquí. Había gente tirada en las calles  drogados, borrachos, gente de mala vida.. Después de un tiempo Laura pensó que  había sido un plan perfecto para asustarla y desilusionarla. Nos sugirió que nos volviéramos a la Argentina.  Es muy feo aquí  dijo.  Yo me quedo. Laura le preguntó. ¿ No querés a tus hijos . El respondió, ni a mi mismo me quiero_.  Una inmensa tristeza invadió el corazón de Laura. Decidió regresar a su país. Con gran dolor preparó las maletas. El mismo los llevó al aeropuerto. El niño le dijo  _Papá vení con nosotros. El  le respondió que no.  Laura jamás olvidó esos ojitos llenos de lágrimas, ni el silencio de la niña, conteniendo el llanto, sin entender el motivo de ese viaje,  de ida y vuelta.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy emotivo tu relato Graciela

Me gusta y celebro tu esfuerzo para lograr tus escritos.

Besos Josefina

Anónimo dijo...

Norma!!!! es hermosa ésta y todas tus pinturas.
Felicitaciones!!!!!

Besos Josefina

Anónimo dijo...

Asan y Eva es excelente

Anónimo dijo...

Quise decir Adán y Eva, excelente pintura!!!!!

Anónimo dijo...

Norma, muchas gracias por tu bellísima pintura, me gustó mucho compartirla en mi relato.


un beso Graciela Celiz