miércoles, 23 de mayo de 2012

Jorge Sombra/Mayo de 2012


TODAVIA
                   
Hombre, hijo del hombre
padre, que habitas la tierra;
propiedad de los hijos.

Hombre, hijo del padre
es hora que despiertes;
dos mil años dormido.

Porque ya ha sido escrito
conocerás la verdad;
sólo así serás libre.

En tanto no la busques
en penas y alegrías;
ella está en la memoria.

En el viejo torrente
del renovado río;
arterial de tu entraña.

Así la apatía, hollara tu existencia
no aportes negritudes;
al verde del planeta.

No todo está perdido,
hay debidos deberes,
hay mañana desde hoy.

Sabrás que en este instante,
hay un gorrión abriendo,
su cáscara a la vida.

Y dentro de un momento,
un lugar de la tierra
abrirá de la rosa, su capullo.

Cierra los ojos, mira,
allí hay una crisálida
extendiendo sus alas.

Y hay poetas creando
todavía
Y hay mujeres pariendo,
TODAVÍA.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Exquisito poema Jorge

Te saluda Josefina