jueves, 22 de octubre de 2009

Nélida Beatriz Hualde-Buenos Aires, Argentina/Octubre de 2009



Mi recuerdo de niña


Cada vez que íbamos al campo, con los preparativos, la casa se llenaba de gritos, de corridas y de nervios.

Con mis hermanos de 5 ,3 y 2 años, y yo de 4 y hasta el perro, nos disputábamos las guascas para matar víboras, las varas para hurgar las cuevas de los topos y un colador grande para cazar mariposas.

Mamá llevaba una caja de cartón inmensa para juntar huevitos, bichitos, flores, semillas, y si teníamos suerte, alguna lagartija.

Quince cuadras bastaban para atravesar el pueblo y llegar al campo, inmensamente grande, muy grande…

¿Adonde vamos mamá?

Allá, donde está el horizonte.

Y avanzábamos corriendo y saltando.

Lo veíamos al horizonte. Era una raya, y nada más. Una raya que podíamos tocar con las manos si continuábamos avanzando.

Y avanzábamos…

Pero mamá,¿dónde queda el horizonte? Y mamá sonreía con su sonrisa de Gioconda que usaba cuando quería impresionarnos, y nos instaba a seguir más rápido, porque si no el horizonte no nos iba a esperar.

¿Allá, no lo ven? Donde está esa línea que junta la tierra con el cielo. Ahí está.

Seguíamos…Nos entrecruzábamos. Peleábamos por algún hueso o una flor de cardo o una piedra…Es mío, es mío, yo lo ví primero. Mamá, dígale que es mío.

Y con risas y llantos y rezongos seguíamos corriendo con el perro entreverándose con nuestras piernas .

Pero mamá,

no llegamos.¿Donde queda el horizonte?

Mas allá, más allá.

Pero nunca lo alcanzamos.

Todavía persigo ese afán de mi niñez de alcanzar el horizonte, pero siempre está más allá, más allá…




2 comentarios:

Anónimo dijo...

Nélida: en ese más allá está el incentivo de la vida misma. Siempre seguir buscando el horizonte, nos sirve para la lucha por alcanzar el destino. Me gustó mucho. Qué Madre sabia!!!. Un abrazo de Laura Beatriz Chiesa.

Anónimo dijo...

Hola Beatríz Que tal??? Hermoso recuerdo de tu niñez, de tu lugar, seguro de tu Entre Rios donde has nacido. Cálido relato.

Besitos y espero verte en la Bohemia de Literarte
Josefina